Jesús es un mejor Salvador (Ester 2:1–18)

Bien, llevo 16 años predicando la Biblia en este lugar. Me encanta hacerlo cada semana y esta semana estoy el doble de emocionado. Estamos en Ester 2:1–18. Véanlo. Jesús, el mejor Salvador. Si tienen su Biblia, busquen ese sitio. Los amo, la gracia de Dios está con nosotros, y gracias por ser una gran iglesia que me permite enseñar la Biblia y gritar. Estoy muy pero muy bendecido.

Y si son nuevos, al estudiar la Biblia, tengan cuidado de no leerla de manera religiosa. Porque la gente religiosa la lee así: «Hay gente buena. Hay gente mala. Quiero ser como la gente buena». Pero nosotros la leemos así: «Por un lado hay gente mala, y por el otro: Jesús». Así es como leemos la Biblia, así que al leerla hoy, conocerán unas personas: Jerjes, Mardoqueo, Ester. Todos tienen sus fracasos, sus errores, y algunos defectos, y veremos cómo interactúa Dios en sus vidas.

Jerjes

Empecemos. ¿Listos? Conocerán a Jerjes primero, Jerjes el Grande. En realidad es Jerjes el Atroz, pero lo llamaban Jerjes el Grande. Su nombre persa era Asuero, su nombre griego era Jerjes. Ester 2:1–4: «Pasadas estas cosas», explicaremos cuáles eran esas cosas en un momento, «sosegada ya la ira del rey Asuero».

¿Alguna vez ha estado en una situación donde se siente furioso, frustrado y refunfuñando? Pues bien, soy irlandés. Siempre digo que tenemos dos emociones: dormido y enfadado. Esas son nuestras opciones. Algunos de ustedes están refunfuñando, están frustrados son más quisquillosos. ¿Cuántos han tomado malas decisiones por estar enojados o frustrados? Todos, ¿cierto? Al rato piensa: «Hombre, qué mala idea».

Este tipo tardó 4 años. A los cuatro años de perder los estribos, se divorcia de su esposa, se levanta un día escuchando música country-western. No tiene a nadie que lo consuele excepto a Jack Daniels, José Cuervo, y Jim Beam. Son los únicos amigos que le quedan al hombre. Está totalmente deprimido. Nos imaginamos a un tipo con una botella, bebiendo, ya no da más, no le va bien: «¡Ay de mí. ¿Qué voy a hacer?». El grande y patético rey Jerjes.

«. . . sosegada ya la ira del rey Asuero, acordó de Vasti», la esposa de la que se había divorciado. Decía: «Oh, echo de menos a mi esposa». No debió divorciarse de ella. ¿Cuántas personas han hecho eso? Ha estado en una relación con alguien, saliendo con alguien, casado con alguien, se frustra y se enoja, y se deshace de ellos. Y después piensa: «Qué idea tan estúpida. ¿Qué estaba pensando? No era para tanto».

¿Por qué rompió con Vasti? ¿Por qué se divorció de su esposa? Ella le dijo que no porque él estaba equivocado. Si él se hubiera arrepentido, podía haberse quedado con su esposa. Siempre tenemos una alternativa Nos quedamos con nuestra esposa o con nuestro pecado. Él decidió quedarse con su pecado y perdió a su esposa.

«. . . Y lo que ella hizo y lo que decretaron contra ella. Y dijeron los criados del rey, sus cortesanos». ¡Aahh! Permítanme decirles esto: Si están pasando un tiempo difícil y están muy pero muy deprimidos, y quieren consejería, no busquen el consejo de «hombres jóvenes». Nunca recibirán buen consejo de hombres jóvenes. Muchos varones están diciendo: «No estoy de acuerdo con eso». Pues claro que no, siempre están equivocados. Es lo que les digo. La Biblia no tiene nada bueno que decir de los hombres jóvenes. Nada. He leído todo el libro. Algunos de ustedes dicen: «Oh, dice que son fuertes». También los terroristas y los pit bull, ¿saben? No es un cumplido necesariamente.

Así que sigamos leyendo. Es una gran historia. «Y dijeron los criados del rey, sus cortesanos»: «Oh, tenemos una idea. Vayamos a la hermandad femenina a encontrar unas vírgenes hermosas». Eso es lo que dice en hebreo: «Busquen para el rey jóvenes vírgenes de buen parecer; y ponga el rey personas en todas las provincias de su reino, que lleven a todas las jóvenes vírgenes de buen parecer a Susa, residencia real,». Hoy es Irán, en el mundo antiguo esto era Persia, «a la casa de las mujeres, al cuidado de Hegai eunuco del rey». Usted dirá: «¿Es eso lo que pienso?». Sí. Qué lástima. «Guarda de las mujeres, y que les den sus atavíos; y la doncella que agrade a los ojos del rey, reine en lugar de Vasti. Esto agradó a los ojos del rey, y lo hizo así».

Está en un estado deprimido, abatido, desanimado. ¿Ha estado así alguna vez? En que todo le va mal ese día y de repente su vida se derrumba y le cae encima, y al ver lo que pasa en realidad no puede culpar a otros. Usted mismo se lo hizo con unas malas decisiones, un poco de egoísmo, orgullo, necedad, y unos estallidos emocionales. Usted mismo lo hizo.

Y permítanme decirles esto: todos nos metemos en estos aprietos porque somos pecadores y somos muy susceptibles a los malos consejos. Cuidado en quién confían. Cuidado de quién se dejan aconsejar sobre todo en sus momentos más vulnerables. El gran Rey Jerjes que reinaba el Imperio Persa; tres millones de millas cuadradas, múltiples lenguas, naciones, y grupos de personas; el hombre más poderoso de la historia hasta ese día; el hombre más rico de la Tierra está solo, está triste, está deprimido, y recibe malos consejos.

Buscando la gloria

¿Cómo llegó a estar así? ¿A cuántos les gustaría saber cómo se metió en este lío para que aprendan por medio de sus errores y dejen que él pague su impuesto por tontos? ¿Buena idea? La primera idea principal es esta: Los que buscan la gloria solo consiguen el sufrimiento. Los que buscan la gloria solo consiguen el sufrimiento. Hasta ese momento en el relato, por lo visto el Rey Jerjes solo vivía para su propia gloria.

Sabemos que el hombre se sienta en un trono, se declara el rey de reyes, invita a la gente a una fiesta de seis meses para banquetear en su presencia y hacer brindis en su honor; quiere que sus órdenes sean obedecidas, quiere que le traigan las mujeres quiere que distribuyan regalos que él da, quieren que le canten alabanzas. Es un tipo que vive para su propia gloria. «Lo más importante soy yo, siempre se trata de mí, totalmente se trata de mí». Y termina buscando la gloria y recibiendo el sufrimiento. Y es cierto.

Usted y yo necesitamos, incluyéndome a mí, que somos propensos a esta misma clase de locura. Martín Lutero dijo correctamente que el pecado es el yo que se doblega sobre sí mismo. Fuimos hechos para glorificar, para alabar, fuimos hechos para adorar, y por causa del pecado glorificamos o tratamos de glorificarnos a nosotros mismos. «Se trata de mi preferencia, mi dinero, mis placeres, mi reputación, mis deseos, mis dolencias, mis anhelos, mis necesidades, y mi mundo debe reconocer mi gloria y servir mi gloria». y terminamos en el sufrimiento porque la gloria no nos conviene. La gloria le corresponde a Dios solamente. La gloria es para Dios solamente, y los que buscan la gloria terminan en miseria, y la Biblia cuenta esta historia con varios personajes en varias maneras y tiempos, una y otra vez. Es la historia de Salomón y muchos otros. ¿Para lo gloria de quién está viviendo? ¿Para cuál gloria está viviendo? Los que buscan la gloria obtienen el sufrimiento.

Y él está perdido. Perdió a su esposa. ¿Saben por qué? Porque si vive para su propia gloria, será imposible vivir con usted. Y su esposa le dice que no. Ella tenía razón mientras que él estaba equivocado, pero en vez de arrepentirse de su pecado, rechaza a su esposa.

Dice que después de un tiempo, o sea cuatro años después, no solo había perdido a su esposa en ese tiempo, la historia extrabíblica nos dice por medio de Heródoto, el padre de la historia, que también perdió una guerra. Ven, él quería gloria. Quería ser un rey que gobernaba todos los reinos de la Tierra. Su padre fue el Gran Rey Darío quien había establecido este imperio que él heredó, y su padre tenía una sola mancha en su récord militar: que falló en su conquista de Grecia.

Fue derrotado, y Jerjes el Grande decide crear el ejército más grande de la historia del mundo y marchar desde Persia hasta Grecia para conquistar los griegos, a fin de exceder la gloria de su padre, pero fue derrotado. No estoy diciendo que la vean, pero eso está representado en la película 300. 2.500 años más tarde todavía estamos contando la historia de la derrota de este hombre.

Incluso hoy por hoy hay un regimiento del ejército griego, según tengo entendido, que aún usa el lema de algo que le dijeron al rey Jerjes cuando entró marchando a Grecia y finalmente fue humillado y derrotado, y dicen que le había dicho a uno de los comandantes o generales griegos: «Tendrán que deponer sus armas», y los soldados dijeron: «Tendrá que venir a quitárnoslas».

Y hasta hoy ese es el lema del ejército griego, y cuentan esta historia a los niños en las escuelas griegas, y si presta servicio militar en Grecia, hablan de cómo aplastaron a Jerjes. «Bienvenido a nuestro equipo». Si busca la gloria, conseguirá el sufrimiento. Este hombre se siente miserable, solo, derrotado. Es rico, poderoso, y está aburrido.

Reemplazando a Dios

Segundo: Cuando no buscamos a Dios, buscamos a otro que reemplace a Dios. Jerjes no vuelve en sí y dice: «Soy pecador. Necesito la ayuda de Dios». En vez de buscar a Dios, busca a los hombres solteros. ¡Hombres solteros! ¡Hombre! Seguro le alcanzaba para pagarle a mejores consejeros. ¿Cierto? Básicamente entró a una fraternidad y dijo: «Oigan, estoy pasando un tiempo difícil. ¿Qué piensan que debo hacer?».

A que no adivinan lo que los jóvenes de la fraternidad le dicen. «Busquemos unas vírgenes jóvenes y hermosas». Lo mismo que dicen los gordos tontos «Eso arregla todo». ¿Cierto? Esos eran sus consejeros sabios. Si no busca a Dios, buscará a otro. ¿A quién busca? ¿A quién ha buscado? ¿De cuáles consejeros ha recibido consejo y fue consejo insensato, no sabio?

Al buscar a sus necios consejeros, le dicen que la respuesta no es buscar a Dios en arrepentimiento, sino buscar a una mujer. «Lo que necesitas es una esposa. Necesitas una mujer. Es lo que necesitas. Con eso se arregla el problema». Muchos tipos aún piensan esto: «Estoy deprimido. Mi vida es un fracaso. No estoy siguiendo a Dios. Todo está derrumbándose. Necesito una mujer». No, no necesita eso. Necesita a Dios.

Lo que pasa es que nuestras relaciones sufren y fracasan por asignarle a la gente una descripción laboral que solo Dios puede llevar a cabo. «Nunca me dejes, nunca me desampares, nunca me falles, ayúdame siempre». La gente fracasa cuando les damos el lugar de Dios en nuestra vida. Su vida entera se vino abajo. Perdió su esposa y la guerra. Es el hazmerreír. Está humillado. Ha sido menospreciado. Está desesperándose. Y quiere que una mujer arregle el problema.

Les diré algo: Como esposo, soy culpable de esto. Le he hecho esto a mi esposa. Le he dado una descripción laboral que solo Jesús puede llevar a cabo en ciertos momentos en nuestro matrimonio. Se lo hacemos a familiares y amigos, y a nuestros compañeros de trabajo, y a nuestros hijos, y a nuestros cónyuges, y a nuestros consejeros. Finalmente, la historia de Jerjes es la historia de todos nosotros hasta cierto punto en ciertos días.

El plan es, hagamos un concurso llamado, The Bachelor: Persia. Es lo que se idean los tipos de la fraternidad. Todos los tipos de la fraternidad están sentados en la casa diciendo: «Hagamos un concurso llamado The Bachelor. Traigamos un montón de vírgenes hermosas para que vengan al spa un año a prepararse para su su única noche con el rey, y la mujer que más agrade al rey ganará. Será un asombroso drama de televisión. Será el mejor reality show de todos los tiempos. La idea ya cobra popularidad en Twitter. Es increíble. «¡Oh, puedes estar con ese tipo!». ¿No es sorprendente que 2.500 años más tarde todavía tenemos los reality show que parte esencialmente de la misma base? Porque el corazón humano nunca cambia, aunque las naciones, los gobernantes y las fechas cambien.

Usando, no amando

Tercero: Cuando usa a todos, no ama a nadie. Y los hombres escogían las escogían por su belleza, y Jerjes escogerá a su esposa por su belleza y su desempeño sexual. Tristemente y trágicamente es lo mismo que hacen muchos hombres hoy. «¿Cómo se ve, y cómo se porta? Y después probaré todas las distintas opciones que puedo traer delante de mí, como un Dios, debo ser adorado en mi gloria, y la que me parezca más hermosa y me dé más placer, estará conmigo en la gran final». Es solo un estadounidense vulgar. Sigamos.

¿Dónde están sus padres?

Permítanme preguntarles también: ¿Cuántos padres al leer esta historia conmigo se alteran? Estas chicas probablemente eran adolescentes. Tengo una hija adolescente. O sea, aquí es donde se me devanan los sesos. ¿Cierto? ¡Un momento, un momento! ¿Qué tal que fuera mía, la dejaría ir? Hablé con Ashley sobre esto. Le dije: «Cariño, ¿qué opinas de esto?». Me dijo: «Papá, ni siquiera voy a ir al baile del colegio». Alabado sea Dios, lo sé, y mucho menos ir a casarte con un pervertido sexual que cree ser Dios y que el Sol habla por medio de él mientras se sienta en su trono borracho.

Al leer esto, pienso: «Hombre, ¿por qué aparece Dios y mata a algunas personas? Lo hace antes a comienzos del Libro. O sea, ¿por qué no manda una de esas plagas egipcias? Un diluvio sería bueno. ¿Nos puede mandar otra oportunidad para hacer surfing? ¿No puede mandar fuego y azufre que bajen del Cielo como les mandó a Sodoma y Gomorra? ¿No hay otro balde allá arriba para echárselo encima a Persia?

¿Cuántos de los padres al ver esto, o los solteros al leer esto piensan: «Mark, me parece una idea perfectamente legítima». Papás, así piensan los solteros. Repito, o sea, puede que no sean los más duchos de la partida los solteros, ¿cierto? No entienden a las mujeres. No las entienden. Ni siquiera tienen una mujer. No entienden a las mujeres. Los solteros son como un perro detrás de un camión de bomberos. O sea, si consiguen uno, no saben qué hacer con él. Así son ustedes con las mujeres. No entienden.

Cuando se vuelven padres, el mundo entero se ve distinto. Todo hombre parece un terrorista con el anillo de la granada tirado. Es peligroso y necesita apartarse mucho de su hija. ¿Amén? Oh, por lo visto algunos de ustedes no tienen hijas, ¿cierto? Los que sí tienen hijas dicen: «¡Sí, sí!».

Lo principal es esto: Todas estas chicas entran desfilando, pero ¿dónde están sus padres? ¿Qué están haciendo? Y sigo pensando en esto: «¡Alguien necesita morir!». Y después me doy cuenta que yo mismo me acosté con una adolescente y yo debo morir, pero Jesús murió y, ¡Aargh! Volvamos al evangelio.

Mardoqueo

Bien, sigamos. Mardoqueo y Ester 2:5–11. «Y había en la fortaleza de Susa». Se supone que no estaba en Susa. Se supone que estaba en Jerusalén. «Un judío que se llamaba Mardoqueo», Es un derivado de un dios pagano llamado Marduk de Babilonia. Es un derivado del nombre. «Hijo de Jair, hijo de Simei, hijo de Cis». Todo esto es histórico, sucedió, y es factual. «Benjamita». O sea, era descendiente del linaje del Rey Saúl.

«Que había sido deportado de Jerusalén». Ahí es donde mora la presencia de Dios. «Con los cautivos que habían sido deportados con Jeconías, rey de Judá». Les explicaré todo esto. Hay mucha historia. «A quien había deportado Nabucodonosor, rey de Babilonia. Y él estaba criando a Hadasa, es decir, Ester». Tiene dos nombres que les explicaré. «Hija de su tío, pues ella no tenía ni padre ni madre. La joven era de hermosa figura y de buen parecer, y cuando su padre y su madre murieron, Mardoqueo la tomó como hija suya.

«Y sucedió que cuando el mandato y el decreto del rey fueron oídos, muchas jóvenes fueron reunidas en la fortaleza de Susa bajo la custodia de Hegai». Bien, un libro de la Biblia lleva su nombre. Aquí está. La estamos conociendo. También fue llevada ¿a dónde? Al palacio del rey. Ay, ay, ay. Una adolescente. «Bajo la custodia de Hegai, encargado de las mujeres. La joven le agradó y halló favor [o gracia] delante de él, por lo que se apresuró en proveerle cosméticos y alimentos», hamburguesas con queso, alitas de pollo, nachos.

«Le dio siete doncellas escogidas del palacio del rey, y la trasladó con sus doncellas al mejor lugar del harén. Ester no dio a conocer ni su pueblo ni su parentela». No le dijo que era judía. «Porque Mardoqueo [su padre adoptivo] le había mandado que no los diera a conocer. Y todos los días Mardoqueo se paseaba delante del patio del harén para enterarse de cómo estaba Ester y qué le sucedía».

Primero que todo, Mardoqueo. Aparece 52 veces en el libro. Hoy en día se piensa que está enterrado en Irán. Por tanto, es un personaje histórico factual y de hecho. Es un hombre que vive lejos de Dios.

Permítanme explicarles eso. Hay mucha historia aquí. Si leen el libro de Daniel, lo que pasó fue que Dios permitió que un rey llamado Nabucodonosor viniera y se llevara a su pueblo como consecuencia y castigo por sus pecados para exiliarlos a Babilonia. Eso dice el libro de Daniel. Da la historia del suceso.

Después vino un rey que no adoraba a Dios, pero creía que nadie debía ser esclavo por lo cual la Biblia lo elogia. Es uno de los pocos elogios en la Escritura de un rey gobernante bueno pero no creyente llamado Ciro. Decretó que el pueblo de Dios fuera puesto en libertad y que podían irse de Babilonia y regresar a Jerusalén.

Dios les había dado esa tierra básicamente desde tiempos de Abraham para que fuera su morada, para que tuvieran allí su templo, donde morara la presencia de Dios y adoraran a Dios como pueblo de Dios en la presencia de Dios. O sea que en esa época estar lejos de Jerusalén equivalía a estar lejos de Dios.

Fueron librados para regresar a Jerusalén, y muchos lo hicieron. Pueden leer acerca de ellos en los libros de Esdras y Nehemías. Es un relato de cómo el pueblo que regresó a Jerusalén a reconstruir la ciudad y el templo.

La pregunta es: ¿Todos regresaron, o algunos del pueblo se quedaron en Persia, lo que hoy es Irán? Algunos se quedaron. La familia de Mardoqueo fue una de las familias que no fue. Y la pregunta es: ¿Debieron ir? Sí, porque el profeta Isaías dio una profecía de parte del Señor que el pueblo de Dios en Babilonia debía regresar a Jerusalén, pero ellos no lo hicieron.

Entonces Mardoqueo es parte del pueblo desobediente de Dios. Incluso podríamos decir que es parte del pueblo rebelde de Dios. No quería andar hacia Dios, no quería andar con Dios, no quería adorar a Dios. Por eso se quedó en territorio pagano con su familia, en la cultura persa, comprometidos y mundanos.

¿Cuántos de ustedes comparten ese trasfondo? No era ateo, pero probablemente no le decía a la gente que adoraba al Dios de la Biblia y le dijo a Ester: «No le digas a nadie que adoramos al Dios de la Biblia». Su fe es muy privada, no pública. O sea que están desobedeciendo el Antiguo Testamento, comiendo alimentos que no deben, celebrando feriados que no deben celebrar, viviendo donde no deben vivir, haciendo lo que no deben hacer, y si les preguntara en privado, ¿Pertenecen al Dios de la Biblia? «Sí, pero no le diga a nadie porque hemos sido comprometidos. Estamos tibios».

Hoy en día los llamaríamos cristianos culturales. Personas que creen en Dios pero posiblemente no son verdaderos creyentes y no están caminando con Dios, y no viven para Dios, y no obedecen a Dios, pero dirían que le pertenecen a Dios. O sea que son hipócritas, no creyentes, o rebeldes. Están en la misma categoría.

¿Cuántos de ustedes son así? Dicen: «No soy ateo». ¿Están viviendo para Jesús? «No, tampoco estoy viviendo para Jesús. Creo en Dios, pero la evidencia no se sostendría ante un tribunal si examinara mi vida». Ese es Mardoqueo. Ese es Mardoqueo.

Y aquí lo vemos haciendo algo bueno. Adopta a Hadasa, Ester, su prima. Es mayor, y la adopta por ser el pariente (varón) más cercano. Pero hace esto: Permite que ella vaya a las audiciones del Bachelorette persa. ¿Está preocupado por ella? ¿Sí o no? Sí, porque dice que velaba por ella cada día. O sea, nos imaginamos a Mardoqueo pensando: «Oh, espero que esté bien… espero que esté bien». Miraba por el portón. «Oh, qué estará pasando». Pero no dice nada ni hace nada.

Muchos hombres, sobre todo muchos padres son así. A veces pecamos por obra al hacer lo que no debemos. Es lo que Jerjes está haciendo. Pero a veces pecamos por omisión al no hacer lo que deberíamos hacer. Mardoqueo es como Adán. El pecado de Adán, nuestro primer padre, fue no decir ni hacer nada.

Aquí el pecado de Mardoqueo es no decir ni hacer nada. Hombres, debemos hablar. Hombres, debemos actuar, sobre todo en lo que respecta a las mujeres, y máxime las mujeres jóvenes. Algunos de ustedes son así como padres. Piensan: «Bueno ahora ella es una mujer adulta. Puede tomar sus propias decisiones. Está saliendo con un fracasado completo que no cree en Dios, y creo que están durmiendo juntos, y ahora van a vivir juntos y estoy muy estresado; le mando mensajes de texto, la llamo, pregunto por ella, y estoy preocupado». ¿Ha dicho algo? «Es que no quiero armar un escándalo». ¿Ha hecho algo? «No he hecho….». ¡Rompa con él! Caballeros, ¡rompan con él!

Es mucho más fácil romper con un tipo, ¿amén? que con mi hija. ¿Verdad? Mi hija no está saliendo con nadie, alabado sea Dios, pero si estuviera saliendo con un fracasado y me dice: «Oh, papá, me manda flores y me siento mal por él». ¡Pues yo no! Yo le diría: «¡No quiero nada más contigo! ¡Adiós!». Sin llorar, sin lágrimas. «No me mandes flores, no me mandes mensajes de texto. No estoy de humor para eso». Puedo deshacerme de un tipo rápidamente, fácilmente, mientras me tomo algo. O sea, no es gran cosa. ¿Cierto? Así que papás, no duden en deshacerse de los novios. ¿Cierto? No, no, no, no. «Y dígale a sus amigos que no». ¿Cierto?

Estaba hablando con Ashley sobre esto, y le dije: «¡Aargh!». Porque como padre esto me saca de quicio. Si un pervertido asqueroso lleva a mi hija por un año al spa para competir contra otras cuatrocientas concursantes para llevársela a la cama. Bien, le pregunté a Ashley, mi dulce hija, le dije: «¿Qué harías?». Me dijo: «Diría que no. Saldría corriendo. Me mudaría a otro país. Me daría rabia. Sería desobediente en el palacio para que me mandaran a casa». Bien, de acuerdo. ¿Y qué crees que haría yo? Me dijo: «Pelearías». Sí, pelearía. «Primero tratarías de sacarme clandestinamente del país, o me esconderías, o declararías la guerra, o atacarías el castillo. Cualquier cosa». ¿Cierto?

Lo que no haría es esto: «Espero que esté bien. Esto me tiene muy estresado. No sé qué decir ni que hacer». ¿Verdad? Hay pasividad, hay pasividad agresiva y hay agresividad. Voto por esa. ¿Cierto? Hombres, es su hija. ¡Es su hija! No oren solamente ni se sientan mal ni se preocupen. Digan algo. Digan algo. No dejen que los tipos tomen las decisiones por sus hijas.

Ester

Ester, su nombre aparece 55 veces en el libro. Está enterrada en Irán. Era una huérfana adoptada. Probablemente era una adolescente o tendría veinte años y pico. Jerjes, el rey, tenía como 35 años. Hadasa era su nombre hebreo, que significa arrayán, que simboliza paz y gozo. Es algo que llevan en las procesiones y en las festividades. Su nombre persa era Ester. Significa diosa de amor, se deriva de Ishtar. También podría significar estrella.

Aquí hay algo interesante. No quiero inferir cosas al texto que no están ahí. Ella tiene dos nombres. ¿Notan eso? Y los menciona a ambos, Hadasa y Ester. ¿Cuál de los dos es? Ambos. Es como una chica con doble identidad. Tiene un nombre persa y un nombre bíblico, y ella vive en el mundo pero también dice que pertenece a Dios. Está confundida. Es una hipócrita.

Así es Ester, Hadasa. Pertenece a Dios, pero no lo demuestra en público. Dice que pertenece a Dios, pero desobedece las leyes alimenticias de la Escritura. Dice que pertenece a Dios, pero vive lejos de Él. Dice que pertenece a Dios, pero hasta este momento nunca le hemos visto orar, abrir la Biblia, adorar a Dios, o arrepentirse de pecado. No hay ningún indicio de que tenga una relación con Dios en absoluto.

Es pasiva. Hasta este momento no ha hablado. No ha hecho nada. No parece tener muchas convicciones propias. Toman todas las decisiones por ella, y parece que su vida fuera un río y ella una ramita arrastrada por la corriente de las decisiones que toman Mardoqueo y Jerjes.

¿Cuántos de ustedes son así? Son medio cristianos, y como que no son cristianos; son medio obedientes, y como que no son obedientes; medio siguen las Escrituras, y como que no siguen las Escrituras; creen en Dios en privado, pero públicamente nadie sabe; saben lo que dice la Escritura, pero no hacen lo que dice la Escritura.

Es difícil con gente así, al igual que con Ester. ¿Es una creyente carnal? ¿Es una creyente rebelde? ¿Es una creyente apóstata? ¿No es creyente todavía? ¿Es una persona religiosa? ¿Es una persona espiritual? ¿Vive en rebeldía contra Dios, o está ciega y ni siquiera conoce a Dios?

¿Cuántos de ustedes conocen personas así? No están seguros de lo que son. Dicen: «Bueno, dicen que creen en Dios, pero no viven para Dios. No sé dónde ubicarlos». ¿Cuántos de ustedes se identifican con eso? Dirán: «Ahí estoy pintado». Ester es un personaje complejo, y nosotros también lo somos. No siempre es clara su postura, y lo mismo con nosotros.

¿Qué hará Ester?

¿Qué va a pasar? Ha aumentado la tensión, ¿cierto? Jerjes hace su audición, Ester está en el harén en el spa. Tiene un número, está en la fila. Viene su noche, su única noche con el rey. ¿Qué hará? ¿Qué piensan que debe hacer?

«Cuando le tocaba a cada joven venir al rey Asuero, al cumplirse sus doce meses, según las ordenanzas para las mujeres, pues los días de su embellecimiento se cumplían así: seis meses; con óleo de mirra y seis meses; con especias y cosméticos para las mujeres». Huelen maravilloso. Huelen potpurríficamente.

«Entonces la joven venía al rey de esta manera: cualquier cosa que ella deseaba se le concedía para que la llevara consigo del harén al palacio del rey». O sea que al entrar se les concedía cualquier regalo que querían. ¿Qué escogerá ella? Llegaría y entraría de noche.

¿Van a salir? No. ¿Empieza con una cena, y: «Cuéntame de tu familia. ¿Cuál es tu color favorito? ¿Sabes leer?»? Nada. ¿Dónde empiezan? A la hora de acostarse. Él es como muchos hombres: Déjame dormir contigo y después sabré si quiero conocerte personalmente.

«Ella entraba por la tarde y a la mañana siguiente volvía al segundo harén, bajo la custodia de Saasgaz», un antiguo rapero persa. «Saasgaz, eunuco del rey, encargado de las concubinas».

¿Pueden ver eso? Se prepara todo un año. Hay una fila de digamos 400 mujeres de larga. Cada noche durante 400 noches, y usted es la número 327. Fijan su fecha en el calendario. Si agrada al rey, es coronada Miss Persia, y si no, se va a vivir a un cuarto muy bonito en el palacio, donde nunca se casará ni tendrá hijos; su vida será lujosa pero sin sentido.

Entran las chicas y salen, y todas hablan. «¿Cómo es él? ¿Qué pasó?». ¿Saben? Se imaginan la intriga y las peleas, y las relaciones complicadas en el harén? Una locura. Y las chicas entraban de noche y salían por la mañana. ¿Desayunaban? ¿Iban a caminar? ¿Iban de visita? Nada. «Puedes entrar a su habitación cuando es hora de dormir. Necesitas vestirte y salir de su habitación cuando salga el sol porque ha acabado contigo. Puede que nunca vuelvas a verlo, puede que nunca vuelvas a hablarle. No se te permite entrar en su presencia a menos que te llame».

¿Cuántos hombres tratan así a las mujeres? «No quiero conocerla, no quiero salir con ella, no quiero amarla, no quiero casarme con ella. Quiero que venga de noche y se vaya por la mañana, y no quiero que me llame, que me mande mensajes de texto, o e-mail. Si quiero verla otra vez, se lo haré saber. aparte de eso, adiós». Lo devastador es que las mujeres en esos días como las mujeres de hoy, compiten por esa clase de hombres. El cuento se pone oscuro y trágico, ¿cierto?

«Ella no venía otra vez al rey a menos que el rey se complaciera en ella y fuera llamada por nombre. Cuando a Ester . . . le tocó venir al rey». Damas, ¿qué piensan que va a hacer Ester? ¿Qué piensan que debe hacer? «Cuando a Ester, hija de Abihail, tío de Mardoqueo, que la había tomado como hija, le tocó venir al rey, ella no pidió cosa alguna sino lo que le aconsejó Hegai, eunuco del rey, encargado de las mujeres. Y Ester hallaba favor [o gracia] ante los ojos de cuantos la veían». Es una palabra muy importante.

Ester fue llevada al rey Asuero a su palacio real el mes décimo, que es el mes Tebet, en el año séptimo de su reinado. Y el rey amó a Ester». Cuidado con esa palabra. Tiene muchos matices de significado, de un hombre que ama su esposa como Cristo ama la iglesia, a como fue tratada Tamar en creo que fue 2 Samuel 13 por un hombre que lo único que quería era acostarse con ella.

«El rey amó a Ester más que a todas las otras mujeres, y ella halló gracia y bondad con él más que todas las demás vírgenes, y él puso la corona real sobre su cabeza y la hizo reina en lugar de Vasti». Ella ganó. ¿Es algo bueno o malo? Sí. «Entonces el rey hizo un gran banquete». El rey sigue con sus fiestas. Bar libre, bufet listo: «para todos sus príncipes y siervos, el banquete para Ester». Llevaban cuatro años sin reina. Ahí viene. ¡Ha escogido una nueva reina! Van a conocerla. Los medios de comunicación están ahí, todos vienen, es fiesta nacional.

«También concedió un día de descanso para las provincias y dio presentes conforme a la liberalidad del rey». Todos están alegres ahora, ¿cierto? Jerjes vivía para su propia gloria y terminó en el sufrimiento. Y todavía vive para su gloria y está causando sufrimiento a otros. Les cuento como padre de dos hijas a las que quiero con todo el corazón, con todo el corazón, pensar que compitan por un hombre, que actúen para un hombre, me desgarra el alma. Ella gana, pero es una victoria trágica.

¿Ester siempre fue una mujer piadosa?

Esta es la pregunta. ¿Están listos? Esta es la pregunta que examinaremos juntos: ¿Ester siempre fue una mujer piadosa? Pueden debatirlo en su estudio bíblico para mujeres. Estoy seguro que lo harán. Pueden debatirlo en su grupo comunitario. Deberían hacerlo. ¿Fue Ester siempre una mujer piadosa? ¿Qué hacemos con esta historia? Escribí un blog sobre esto. Pueden leerlo. Permítanme resumirlo.

En esto estamos de acuerdo. Primero, Jerjes es un hombre horrible. ¿Podemos votar todos? Todos a favor: Jerjes es un imbécil. ¿Bravo? ¿Quién vota conmigo? Si, está bien. Sí, está bien. Si este tipo viniera a mi casa a decirme: «Me gustaría conocer a su hija», Estaría en el ministerio carcelario desde el interior de la cárcel por lo que le haría a este hombre. ¿De acuerdo? No.

Segundo: al final del libro, Ester es una mujer piadosa. Al final, o sea en lo más profundo es piadosa. Deja de ser pasiva, empieza a ser activa. Empieza a hablar por su cuenta, y no dejar que otros hablen por ella. Empieza a nadar contra la corriente de la cultura y a no ser mundana sino a portarse piadosamente. Hay un tipo llamado Amán. Era como el Hitler de su día porque quería aniquilar al pueblo de Dios. Pero ella lo enfrenta con denuedo y valor y se arriesga. No quiero estropearlo todo. Todavía me faltan unas semanas de prédica, pero ella lo derrota.

Pero termina siendo piadosa. Todos estamos de acuerdo con eso. Termina siendo piadosa, pero la pregunta es: ¿Siempre fue piadosa? ¿Es básicamente como María, la madre de Jesús? La vemos al principio: piadosa; la vemos después: piadosa; la última vez que la vemos: piadosa. De principio a fin: asombrosa. ¿Es María 1,0? Una adolescente piadosa.

Tercero, el libro de Ester es quizás el más difícil de interpretar de toda la Biblia. Lo es, porque ante todo no nos dice que «entró y salió y triunfó». ¿Cómo? ¿Qué estaba pensando? No sabemos. ¿Qué estaba sintiendo? No sabemos. ¿Qué motivos tenía? No sabemos. ¿Qué hicieron? Creo que lo sabemos, pero no lo sabemos. No nos da muchos detalles. Ester es narrado de una manera que no describe los sentimientos, los pensamientos, la motivación, y las intenciones; solo los hechos.

Además, no nos da ninguna perspectiva divina. Dios nunca habla, el profeta no aparece. Dios nunca es mencionado. Y si lee otros libros de la Biblia, nunca mencionan a Ester, por lo tanto no hay comentario en la Escritura. En los primeros siete siglos de la iglesia cristiana, no hubo un solo comentario escrito sobre Ester porque todos pensaban: «Pues, no sé. Es como un campo minado. Aléjense de ese libro y estudien Romanos mejor. No sé». Es un libro difícil.

Permítanme decirles. Me gusta decir: «Así dice el Señor». Pero a veces tenemos que decir: «Pienso que». Cuando Dios es claro, debemos ser claros. Cuando no es claro, necesitamos ser tan claros como Dios. Y lo que puedo decirles en Ester es que a veces decimos: «Esto es posible, pero esto es probable», pero a veces no pasamos de ahí.

Volviendo a la pregunta original, porque estaba tratando de ponerlos de acuerdo conmigo. Espero que lo haya logrado. Aquí es donde no estaremos de acuerdo. ¿Fue Ester siempre una mujer piadosa? Hay tres perspectivas.

1ª opción

Primero: Ester siempre fue piadosa, maravillosa, de principio a fin. Si ven la película: Una noche con el rey, no estoy tratando de ridiculizar la película porque al menos tratan de relatar una historia de la Biblia. No me opongo a eso. ¿De acuerdo? Pero no me parece que cuentan la historia muy bien. En toda la historia, Ester se aprende los pasajes bíblicos de memoria, cita las Escrituras, dirige estudios bíblicos para mujeres, y grupos de oración en el harén con todas las concubinas.

Y cuando llega el momento de estar con el rey, probablemente no se acuesta con Él y se mantiene virgen, aunque tiene un sueño como de fantasía en donde duerme con el rey. Nos dejan pensando que era como la virgen María hasta la noche de su boda, y que Jerjes en verdad la amaba y que eran como Romeo y Julieta, y que el rey rehúsa acostarse con otras mujeres por lealtad a ella.

Pensé: «Eh, probablemente no». No conozco a ningún hombre que haga una fila de 400 mujeres para ensayar la fidelidad. ¿Cierto?

Y en parte contamos la historia de esa manera es porque tanto cristianos como judíos y otros leen la Escritura religiosamente y piensan: «Hay gente buena, y gente mala. Dios ama a la gente buena, no a la gente mala. Dios usa a la gente buena, no a la gente mala. Si Dios usó a Ester, es porque ella era buena persona».

Entonces es un Libro inútil. Si la historia dice: «Dios ama y usa a la gente buena y no ama ni usa a la gente mala», es un libro inútil. Si la historia se trata de eso, que debo ser mi propio salvador, mi propio héroe, que tengo que enderezar todo lo que torcí; o peor aún, lo que usted tuerce no puede enderezarse en absoluto porque usted es mala persona y Dios no ama la gente mala y usted ha hecho cosas malas y Dios no usa a quienes han hecho cosas malas.

Eso conduce a una de dos cosas: al orgullo o a la desesperación. «Soy buena persona, Dios me usa», o a la desesperación: «Es demasiado tarde. Ya lo eché todo a perder. Soy una mala persona. No soy Ester, soy Jerjes. No soy Ester, soy Mardoqueo». Es un asunto de suma importancia el acercamiento que damos a la Biblia.

La gente religiosa le da un acercamiento de: gente buena, gente mala. Haz lo bueno y Dios te bendecirá. Has lo malo y Dios no te bendecirá». Pasan por alto el mensaje entero de la gracia, que Dios ama a los que no lo merecen. y a los que no han hecho nada para merecerlo. Que Dios usa a los que no lo merecen. Que Dios usa a los que no lo merecen. y pasan por alto que a veces las personas en la Biblia son muy normales, como nosotros. Puede que Ester sea muy normal.

Hoy de pronto cuentan la historia de esta manera: Había una chica pobre que vivía en una gran ciudad, su trabajo no tenía futuro y de pronto The Bachelor vino a la ciudad y ella ganó. Y dijo que era cristiana pero no oprimió aquella casilla en su página de Facebook porque quería que nadie lo supiera». Puede que ella sea como muchos de nosotros.

Y lo que pasa con esa clase de lectura religiosa de la historia es que nos perdemos la parte del pecado. Y decimos: «Abraham fue un hombre de fe que regaló a su esposa dos veces». Oh, nos perdimos esa parte. A propósito, fue dos veces más de la cuenta. Decimos: «Oh, Noé era un hombre piadoso, construyó un barco». Sí, después se bajó del barco se emborrachó y se desnudó. Como que fue el primer marinero borracho. Nos perdimos esa parte. Perdió el conocimiento de lo borracho que estaba, quedó desnudo en su carpa, como un redneck en un feriado de tres días. Así era Noé. ¿Cierto?

Usted dice: «No, no, hay gente buena ahí». ¿Quién? «David era un hombre conforme al corazón de Dios». Y la esposa del otro hombre. Oh, sí. Mató al esposo y se quedó con su esposa. Uno no tiene que ser cristiano para decir, «No creo que eso esté bien. No creo que eso esté bien». Alguien dice: «Pero al final fue un hombre muy piadoso». ¿Saben lo que hizo en su lecho de muerte? Mandó sicarios a asesinar a alguien.

Supongamos que Billy Graham estuviera casi al final de su vida. Lo amo. Si en su lecho de muerte dijera: «Vayan y maten a fulano», yo estaría muy decepcionado, ¿verdad? «Billy, vas muy bien. Oh, esta vez lo echaste todo a perder. ¿Mandaste sicarios a asesinar a alguien en tu lecho de muerte?». Es lo que hizo el rey David.

¿Saben qué? En realidad este es un libro muy bueno. Hasta los héroes son héroes pequeños con h minúscula, y todos necesitan un Héroe con H mayúscula llamado Dios, Jesús. Lo más probable es que Ester—es posible pero no probable que haya sido una mujer piadosa toda su vida.

2ª opción

Segundo, es una perspectiva más seria que queremos tomar en cuenta, que Ester fue víctima inocente de la agresión sexual. Cuentan la historia de que era pobre, joven, sin poder. Un rey la manda a integrarse al harén, la llevan contra su voluntad a acostarse con un hombre que no ha escogido, junto con centenares de otras mujeres, y esto es como la trata sexual. Es posible, pero permítanme decirles: puede que no sea probable. Si eso le pasó a Ester, fue horrible, maligno, horrendo.

La iglesia Mars Hill existe por muchas razones, pero una de las que más queremos de todo corazón es ayudar a mujeres y hombres. 1/3 de las mujeres y 1/6 de los hombres son agredidos sexualmente. Grace y yo tratamos ese tema en El verdadero matrimonio. Justin y Lindsey Holcomb escribieron un libro titulado Rid of My Disgrace (Libre de mi desgracia) para ayudar a los que han sido agredidos. Tenemos grupos de redención para ayudar a los que han sido agredidos. Tenemos el REST Ministry (Ministerio de Descanso) para sacar a los que enfrentan situaciones de agresión, tráfico sexual. Esto nos importa.

Es posible, pero no estoy seguro que sea probable porque no dice eso. No dice lo que pasó. Lo único que dice fue que entró, salió, y él la escogió. No dice cómo se sintió ella, o si la forzó. No lo dice. Y permítanme decirles que cuando la Biblia habla, lo hace muy claramente. Por tanto, cuando hay situaciones de agresión sexual en la Escritura, la Biblia lo dice.

Les daré un ejemplo devastador en Génesis 34 con una joven llamada Dina. La historia dice que ella salió con un joven que la agredió. Es un relato muy claro y devastador. La Biblia no escatima palabras tímida y cobardemente. La Biblia no es tímida, y cuando algo malo pasa, Dios lo muestra en toda su plenitud. No lo suaviza, no lo dulcifica. Lo deja tal cual.

La verdad es lean conmigo lo que dice y no dice eso. Creo que podemos inducir cosas en la historia pero no estoy seguro que podamos deducir eso de la misma. Las primeras dos perspectivas son posibles.

3ª opción

En mi opinión la tercera perspectiva es probable, o sea que Ester no se presenta como un personaje estático o llano en todo el libro. Los conocerán. Amán es un personaje consecuente, llano, porque nunca se arrepiente. Es malvado simplemente. Jerjes es un personaje llano, estático. Nunca cambia porque nunca se arrepiente.

Los que se arrepienten dejan de ser estáticos, son dinámicos. No permanecen igual, cambian. Es lo que llamamos santificación progresiva. Significa que cuando uno conoce al Dios de la Biblia, uno cambia, y entre más camina con Él, más cambia. Ella adora a Jesús. Que nos quede bien claro. Espera la venida del Salvador que había de venir. Y nosotros también. Se aburrió un poco esperándolo. Nosotros también.

Por eso tenía una doble identidad, la mitad en el mundo, y la mitad en el reino de Dios; medio pecaba, medio desobedecía; medio espiritual, medio no espiritual. Está confundida. Tiene una doble identidad. La Biblia en el Nuevo Testamento diría que ella es mundana. Creo que no empezó siendo la mujer más piadosa, pero al final figura entre las mujeres más piadosas. Lo digo por estas razones:

Primero: En ese momento en la historia de Ester, nadie caminaba con Dios. No estoy criticando solo a Ester. Algunos de ustedes dirán: «Está criticando a Ester». Estoy criticando a Jerjes, a Mardoqueo, a mí mismo, a ustedes. Todos somos criticados por igual, ¿cierto? Por el hecho de examinar a una mujer no significa que estemos criticando a todas las mujeres. De igual manera, si criticamos a Jerjes, no significa que critiquemos a todos los hombres, aunque tenemos licencia porque todos los hombres y mujeres somos pecadores, y si tomaran la historia de nuestra vida y la contaran hasta el último detalle, nos sentiríamos muy desilusionados, ¿verdad?

Hasta este momento en la historia nadie está caminando con Dios. Nadie. Nadie ora, nadie menciona a Dios, nadie adora a Dios, nadie diezma a Dios, nadie va a Jerusalén, nadie celebra las fiestas y los festivales, nadie ofrece sacrificios por sus pecados. No hay nada. Nadie cita un verso. Nada. No hay nada espiritual. Por tanto no es que Ester no sea piadosa, sino que nadie lo es.

Segundo: Está viviendo lejos de Dios. Repito, Dios dio orden por medio de Isaías que regresaran a Jerusalén. Ahí es donde estaba la presencia de Dios. Ella no está ahí. Vive lejos de la presencia de Dios.

Tercero: Está desobedeciendo los mandamientos de Dios por medio de Isaías viviendo rebeldemente, al igual que nosotros.

Cuarto, pudo haber dicho que no. Algunos dicen: «Podían haberla castigado». A veces en la Biblia las personas dicen no a los gobernantes y son castigados. A veces en la historia las personas dicen no a los gobernantes y son castigados. Decimos que tienen denuedo. Pero en verdad no hay indicio alguno de que la hubieran castigado.

Una mujer ya enfrentó al rey diciendo que no, ¿y qué le pasó a ella? Fue desterrada, lo cual era más o menos lo que ella quería. Vasti dijo: «Díganle al rey que no quiero estar en su presencia», y el rey le dijo: «Decreto soberanamente que a ella no se le permita estar en mi presencia». Bien, estamos de acuerdo. Probablemente la relegaron a algún lugar en el palacio lejos del rey. Puede que eso fue todo lo que le hubiera pasado a Ester si ella hubiera rehusado.

Quinto: Come alimentos prohibidos en el Antiguo Testamento, desobedeciendo las Escrituras. Hay otro hombre llamado Daniel que vivió un poco antes que ella, era un joven bajo un rey impío llamado Nabucodonosor, el cual mencionan aquí. Y cuando le dijeron a Daniel: «Come esta comida» ¿qué dijo Daniel? Que no. Pero Ester dice que sí. Hace lo que no se debe hacer.

Esto es lo que sabemos: Los hechos mínimos. Se prepara un año, entra de noche, sale por la mañana, y el rey dice: Ella es mi favorita. La Biblia no nos da muchos detalles. No la pinta a la luz de fuertes tonos negativos, no obstante, es una luz, una luz crucial. ¿Qué piensan?

¿Cuántos de ustedes se identifican con la historia de Ester? «Sí, he transgredido algunos mandamientos. Me he acostado con alguien o con algunas personas. He escondido mi fe cristiana. He tenido un pie en ambos mundos. He vivido una vida comprometida e inconstante».

¿Saben qué? Hallo mucho aliento y esperanza en la historia de Ester. ¿Saben por qué? Yo soy como Ester. Me crié en un hogar levemente católico. Mi madre amaba a Jesús pero yo no adoraba a Dios, no leía la Biblia, no oraba, excepto cuando pensaba estar en grandes aprietos y como que le daba a Dios un seguro contra incendios. «Dios, ¡por favor sácame de esto! Gracias». De vez en cuando iba al servicio de Navidad o de Pascua en la iglesia, muy aburrido porque mi madre me instaba, porque era como una tradición.

Si usted me hubiera preguntado: «¿Usted es cristiano?». Le hubiera dicho que sí, pero la evidencia no se sostendría ante un tribunal. Lo mismo con Ester. Pequé sexualmente, hacía lo mío, era un adolescente. No era ateo, pero definitivamente no vivía en una relación con Dios, y no estaba creciendo ni cambiando.

Y pienso que lo que le pasa a Ester en la historia es que Dios se apodera de su corazón y de alguna manera se convierte y empieza a crecer espiritualmente como persona. Yo experimenté lo mismo en mi vida a los 19 años de edad. No quiero condenar a Ester. Lo que quiero hace es invitar a todos los que se identifican con la historia de Ester a conocer al Dios de Ester como ella lo conoció.

Esperanza para el pueblo mundano de Dios

¿No encuentran gran esperanza en la historia de Ester? Dios toma personas defectuosas, pervertidas, rebeldes que no caminan con Él, personas que no le obedecen, personas alejadas de Él, y les da gracia y favor, y los escoge. ¡Vaya! ¡Hay esperanza! Eso es esperanza. Por lo tanto, tengo esperanza.

Aquí hay un poco de esperanza para el pueblo mundano de Dios. Algunos de nosotros somos el pueblo mundano de Dios. Primero: Igual que Ester, Dios camina con usted aunque usted no esté caminando con Él. Ester no asiste a la sinagoga. Ester no lee las Escrituras. Ester no está orando. Ester no está adorando. Ester no está diezmando. Ester no va al templo a ofrecer sacrificio en obediencia a Dios. Ester no hace nada de eso. No camina con Dios, pero Dios está caminando con Ester. Con su sutil y suave mano providencial, obra por medio de las circunstancias de su vida.

Y aunque tome malas decisiones o aunque tomen malas decisiones que la meten malas situaciones, Dios sigue ahí resolviendo, obrando con ella, puliéndola a ella. ¡Qué alentador es eso! Algunos de ustedes dirán: «No he estado caminando con Dios». Le tengo buenas noticias: Dios ha estado caminando con usted. Él está ahí. No está lejos. Usted ha caminado muy lejos, pero Él es un Dios consagrado.

Segundo: Igual que Ester, Dios da «favor» a personas que no lo merecen, o que no han hecho nada para merecerlo. Usa la palabra favor y gracia las cuales ella encontró a los ojos de los encargados del palacio. Amigos, es como una elección. Dios mira desde arriba y dice: «Voy a bendecirte, y voy a amarte, y voy a adoptarte y voy a salvarte y voy a ayudarte y voy a trabajar contigo». A primera vista decimos: «No es justo». No, es gracia. Es algo inmerecido, menos que inmerecido.

Algunos al ver la historia, dicen: «Ester no pidió eso. Así es como funciona. No buscamos a Dios. Él nos busca a nosotros. No clamamos a Dios, Dios viene a nosotros. No recibimos lo que merecemos, Jesús recibe lo que merecemos. Recibimos gracia y favor. En el Antiguo Testamento es un concepto llamado hesed. Es una palabra hebrea que aparece aquí en Ester que significa el amor de Dios por el pueblo de su pacto. La Biblia Jesus Storybook lo llama el amor que nunca para, que nunca se rinde, inquebrantable, por siempre y para siempre. Así es el amor de Dios.

Tercero: Igual que Ester, Dios puede ayudarle a superar los problemas en que se ha metido. Dios no debe ser culpado por las decisiones que tomaron Mardoqueo, Jerjes, y quizás hasta la misma Ester. Tomaron decisiones que pusieron a Ester en una situación muy precaria.

¿Cuántos de ustedes son como Ester? Las decisiones que ha tomado y que otros han tomado han complicado mucho su vida en este momento. Usted dice: «Me casé con un incrédulo. Es horrible. Tenemos hijos; ni siquiera estamos casados. Es un desastre. Es complicado y me encuentro en situaciones de las que no puedo salirme. Estoy en un aprieto, como Ester». Cuando le ponen la corona en la cabeza y la llaman reina y la sientan adelante, está como en un aprieto. ¿Cierto?

Dios le ayuda en medio de la situación. Dios no la saca del asunto, Dios no le da la vuelta al asunto, Dios obra con su invisible mano providencial en medio de la situación para superarla. Es lo que está haciendo en su vida. Aunque haya tomado decisiones y otros hayan tomado malas decisiones que lo ponen en aprietos, Dios, con su mano providencial le ayudará en medio de la situación a superarla.

Y cuarto: Igual que Ester, Dios necesita salvarlo antes de que usted pueda ayudar a salvar a otros. Algunos de ustedes están preocupados por muchas personas y quieren ayudar a muchas personas. Se interesan por muchas personas. Dios necesita salvarlos antes de que puedan ayudar a salvar a otros. Antes de que Ester pueda ser la que Dios usa para salvar a su pueblo, Dios primero tiene que salvar a Ester. Cambiar su corazón, su mente, su vida, para que pueda formar parte de su plan.

Dios necesita salvarlo antes de que usted pueda ayudarle a salvar a otros. O sea, apartándose del pecado y confiando en Jesús, recibiendo una nueva naturaleza y un nuevo corazón, y el castigo lo recibe Él y la vida nueva viene a usted para que pueda experimentar la conversión y el cambio de carácter, como Ester.

Jesús es un mejor Salvador

Finalmente, Ester es una clase de Cristo. Es un cuadro, un retrato, una señal, un símbolo que señala a Jesucristo. Toda la Biblia se trata de Jesús. Es para nosotros, pero se trata de Él. No se trata de nosotros principalmente, sino de Él, y en aquel momento esperaban a un rey más grande, y otro reino, a un Salvador y Libertador y todas las personas y todas las cosas anhelan y ansían y atienden la venida de Jesús. Ester es una clase de Cristo. Es un pequeño cuadro y retrato.

Igual que Ester, Jesús viene del linaje del pueblo del pacto de Dios. Igual que Ester, Jesús creció lejos de su hogar, su hogar celestial. Igual que Ester, Jesús creció en un mundo pecaminoso. lleno de tentaciones y valores comprometidos. Igual que Ester, la identidad de Jesús era desconocida en sus primeros años. No lo reconocían como Dios. Igual que Ester, Jesús fue adoptado por un padre terrenal, un hombre llamado José.

Igual que Ester, Jesús creció en circunstancias pobres y humildes. Igual que Ester, Jesús era un candidato improbable para la realeza. Igual que Ester, Jesús enfrentó gobernantes malvados para salvar a su pueblo. Igual que Ester, Jesús salva a su pueblo de la muerte. Jesús es un mejor Salvador que Ester, y este tema de reyes y reinos que hace eco en todo el argumento del libro de Ester es tan magnífico, tan prevalente, tan prominente.

Y aunque Jerjes se sienta en su trono, para nosotros Jesús está sentado en su trono. Jerjes reina sobre un reino que cubre muchas naciones, pero Jesús reina como un rey en un reino sobre toda las naciones. Las personas se reúnen para darle gloria a Jerjes, y cuando nos reunimos como iglesia nos congregamos en torno a Jesús resucitado, el mejor Rey con el mejor reino. El que únicamente es digno de gloria.

Y Jerjes enviaba a sus siervos a tomar hombres y mujeres, jóvenes y jovencitas, para traerlos a su reino a ser castrados y abusados; pero cuando salimos invitamos a las personas a conocer el Rey Jesús y a hacerse ciudadanos de su gran reino, y nuestro Jesús nunca trata así a nadie. Nuestro Jesús no menosprecia a los hombres ni abusa a las mujeres. Él no es así.

Las buenas noticias, Mars Hill, es que cuando salimos a invitar a las personas a nuestro Rey y a su reino, se nos asegura, se nos garantiza que seremos tratados con amor, gracia afecto, favor y bondad. No es un Dios que les da vergüenza, es un Dios que quita su vergüenza. No es un Dios que los usa, es un Dios que les sirve. No es un Dios que los desanima. es un Dios que les da ánimo.

Nuestro Jesús es mucho mejor que Jerjes, y su reino es un reino mucho mejor, y aunque Ester es una gran chica al final del libro, nuestro Jesús como Salvador es muchísimo mejor.

Lo que hacen es reunirse en torno al rey. Mars Hill, eso es lo que llamamos iglesia. Nuestro Rey está vivo. Se reunían en torno al rey a comer y a beber, y había glotonería y pecado. Venimos a estar en comunión, a comer y a beber con moderación. No a pecar con nuestro Rey, sino a celebrar al Rey que murió por nuestro pecado. Venían a cantar en esos enormes y suntuosos banquetes. Venimos a cantar y a celebrar a Jesús, nuestro gran Rey y su gran reino.

El gobierno de Jerjes se extendía en base a elevados impuestos. Forzaba a su pueblo a dar. Nuestro Jesús no exige, no toma. Invita. Invita a los que ama y a los que le aman a dar generosamente para la expansión de su reino. El reino de Jerjes finaliza en Grecia, y fue derrotado. El reino de Jesús no tiene fin. Cuando damos al reino de Jesús, es para predicar el evangelio, plantar iglesias, y para que las vidas sean cambiadas en todas las naciones de la Tierra, para que las personas conozcan a nuestro Rey, y para que su reino reine en la Tierra. ¿Amén?

Una actualización de Mars Hill

Lo que vamos a hacer ahora es invitarlos a responder a Jesús. Ellos respondían a Jerjes y nosotros respondemos a nuestro Rey. Tomaremos la comunión, cantaremos y recolectaremos nuestra ofrenda; aquí es donde damos a nuestro Dios y a su reino. Mientras los administradores financieros recolectan la ofrenda, ¿puedo compartir con ustedes unas buenas noticias, unos reportes de la expansión del reino de Dios? Hay mucho de qué estar agradecido. Empezaré dándoles algunos motivos de oración, oportunidades para dar y cuidar.

Permítanme empezar con esto: amamos a las personas y damos generosamente para que podamos amar, ayudar, y servir a las personas. Mientras los administradores recolectan la ofrenda, tengan eso en mente. No se trata de los recursos sino de la gente que queremos amar y ayudar y servir, y que los recursos están destinados a la expansión de la obra del reino.

Hemos tenido el año más grande hasta ahora. 1.400 personas han conocido a Jesús y fueron bautizadas en la Iglesia Mars Hill en los últimos 12 meses. Es genial.

Les contaré una historia. Hablaba con uno de nuestros líderes, un gran hombre. De hecho fue salvo en la Iglesia Mars Hill, y su esposa ahora enseña en el ministerio para mujeres. Y dijo: «Sí, estaba en el gimnasio levantando pesas y miré y había un hombre con una camiseta negra que decía: “Muerte, Sepultura, y Resurrección”, o sea nuestra camiseta de bautismos». Va y le pregunta al tipo: «¿Asiste a la Iglesia Mars Hill?». Y el tipo le dijo: «Sí, usted me bautizó». «Oh. ¿Cómo le va?». El tipo le dice: «¡Súper! Amo a Jesús, estoy leyendo la Biblia, estoy en un grupo comunitario, estoy en la clase para nuevos miembros, sabe. Jesús está cambiando mi vida». Un nuevo Rey. 1.400 personas andan por ahí con esas camisetas tan solo este año. Tan solo este año.

En cuanto a nosotros, vemos que el reino de Dios está expandiendo. No lo digo presuntuosamente, sino extenuantemente. Hace poco fuimos honrados como la tercera iglesia de mayor crecimiento en los Estados Unidos de América, o sea que estamos cansados. Es como la mujer que dijo: «Estoy embarazada con siete hijos». O sea, ¡Viva! ¿No es cierto? Es maravillosamente extenuante. El personal está cansado, y trabajan largas horas, y todo está estallando y tratamos de mantenernos a la altura pero estamos celebrando porque un nuevo estilo de vida siembre es algo bueno.

Por tanto oren por nuestras iglesias y les daré unos reportes del reino de Dios en expansión. Puede que ya lo sepan, Mars Hill Downtown tiene un nuevo contrato de arrendamiento con la iglesia más antigua de la historia de Seattle. Ninguna iglesia se ha reunido ahí por cinco años, y estamos preparándonos y esperando entrar en unos meses para que más personas conozcan a Jesús en lo que antes era pero ya no es la ciudad con menos iglesias en Estados Unidos. Además… pueden aplaudir si quieren. [Aplaude la congregación]

Este es el edificio que Mars Hill Everett podría ocupar. Es una vieja armería, lo cual es asombroso. Tuvimos una reunión visionaria ahí hace poco y estamos tratando de recaudar dinero para ocupar ese espacio, para tener más asientos y expandir el reino de Dios al norte de Seattle.

Por último, hemos obtenido oficialmente una de las iglesias más antiguas de Tacoma, y esperamos abrir Mars Hill Tacoma ahí en 2013 en un grandioso y viejo edificio. Y queremos hacer esto porque creemos que nuestro Rey es el mejor Rey y su reino es el mejor reino, y queremos impulsar el reino de Dios. ¿Amén? Es lo que queremos hacer. Económicamente las cosas están muy ajustadas y necesitamos que den generosamente.

Algunos de ustedes se preguntan: «¿Nos alcanza para esto?». La verdad es que para Downtown, Everett, y las otras instalaciones, los edificios que vamos a ocupar tienen al menos dos veces más asientos y cuestan menos que nuestros arriendos actuales. O sea que obtendremos el doble de asientos por menos dinero de lo que pagamos actualmente, porque nuestro Rey también da cupones y cupones para grupos y estamos muy pero muy agradecidos pro eso.

Además, están dando alrededor del mundo. Permítanme mostrarles unos plantadores de iglesias que ustedes patrocinan en Etiopía. También estamos apoyando plantadores de iglesias en la India y en otras naciones alrededor del mundo y les seguiremos dando más informes y adelantos. De parte de nuestro Señor Jesús, gracias por preocuparse no solo de nuestra nación sino por su reino.

Cerraré con un relato. Fue genial. Estaba en Indianápolis hace poco, predicando. Y había una fila muy larga de gente, y cada persona con la que hablé y con la que oré después de la predicación dijo: «Díganle a las personas de la Iglesia Mars Hill, que gracias. Recibimos los recursos gratuitos y vemos lo que está pasando». Están orando por nuestras iglesias. Fue algo sensacional. El señor de Guatemala dijo: «Díganles que gracias por poner las cosas en español».

Una señora vino llorando y dijo: «Dejé a mi esposo por otro hombre y alguien me mandó uno de los sermones de Mars Hill sobre El verdadero matrimonio, y le entregué mi vida a Jesús, volví a casa y le pedí perdón a mi esposo. Él dijo que Jesús murió por los pecados y que no tenemos por qué matar nuestro matrimonio. Estaban agarrados de la mano llorando y diciendo: «Dígale a las personas de Mars Hill que gracias por difundir el evangelio gratuitamente». Reconciliaron su matrimonio.

Hay un sinnúmero de historias de Dios que da su favor y su gracia a las personas y para nosotros es un honor y nos emociona ser parte de lo que Él está haciendo. ¿Amén? Si no vinieron preparados para dar, pueden hacerlo en MarsHill.com/give. Den a su iglesia, oren por su iglesia. Somos parte del reino de Dios, y las personas necesitan mucho a nuestro Rey. ¿Amén? La gente necesita nuestro Rey.

Señor Jesús, eres un gran Rey. Tienes el mejor reino. Señor Jesús, confesamos que somos como Ester. No empezamos listos, preparados, piadosos, y puros. Somos culpables, estamos confundidos, descalificados, y somos un desastre. Pero tú nos das hesed, amor de pacto, favor y gracia, y nos cambias, y nos permites formar parte de lo que estás haciendo para expandir tu reino. Venimos ahora a tomar parte en la comunión, al banquete con nuestro Rey, a cantar alabanzas a nuestro Rey, porque nuestro Rey es el mejor Rey, por eso te damos gracias. Señor Jesús, amén.

Nota: Esta transcripción ha sido editada para la legibilidad.